“El cambio de escala es a veces una cuestión de supervivencia. Primero vemos la montaña y luego dibujamos una línea en el mapa. Así, línea a línea, formamos la cordillera que no podemos abarcar con los ojos y, solo a través del ejercicio de la reducción, somos capaces de trazar un camino, tal vez, también, de transitarlo. De todo lo que nos importa y no comprendemos terminamos por dibujar un mapa, alterando al hacerlo el verdadero tamaño de nuestra ignorancia.”

jueves, 24 de diciembre de 2009

Regina Brett


Perdonad mi ausencia...... volveré con más energía y con más inspiración cuando el año comience. Muchas gracias a todos los que apesar de ello seguís encontrando en la cueva un lugar bonito. Para mí la cueva sigue siendo nuestro refugio. Os deseo una muy feliz navidad a todos y un magnífico 2010 lleno de cosas maravillosas, de amigos que sean tesoros, de mucha salud y de ezperanza para todas vuestras nuevas oportunidades. 

 “la vida no es justa, pero aún así, es buena.”

 “la vida es demasiado corta para perder el tiempo odiando a alguien.”

 "Tu trabajo no te cuidará cuando estés enfermo. Tu familia y tus amigos sí. Mantente en contacto.”

 “Liquida tus tarjetas de crédito cada mes.”

 “Llora con alguien. Alivia más que llorar solo.”

 “Está bien si te enojas con Dios. Él lo puede soportar.”

 “Cuando se trata de chocolate, la resistencia es inútil.”

 “Haz las paces con tu pasado para que no arruine el presente.”

 “Si una relación tiene que ser secreta, no debes estar en ella.”

 “Nunca es demasiado tarde para tener una niñez feliz, pero la segunda depende de ti.”

 “Si se trata de lo que amas en la vida, no aceptes un “no” por respuesta.”

 “Enciende las velas, usa las sábanas bonitas, ponte la lencería cara, No la guardes para una ocasión especial. Hoy es especial.”

 “Enmarca todo desastre con estas palabras: “en cinco años, ¿esto importará?”

 “No te tomes tan en serio. Nadie más lo hace.”

 “Cede.”

 “Cree en los milagros.”

 “Sal todos los días, los milagros están esperando en todas partes.”

Regina Brett.

viernes, 13 de noviembre de 2009

CUANTO MÁS ME SUJETAS

MÁS MIEDO TENGO DE CAER...


miércoles, 30 de septiembre de 2009


    Tengo sueños inacabados, 
Tengo principios de incertidumbre,
Tengo besos que nunca he dado
Y promesas que con burla me confunden

Me cansan tus abrazos
Te cansan mis comienzos,
Me duelen tus rechazos,
Te caes con mis tropiezos. 

Hay cristales en los tejados
Y me he cortado de tanto volar.
Echas de menos lo que no he dado
Y me reprochas que aún sepa amar. 

Coge los restos que no he probado,
Se me ha olvidado cómo temblar.
Entre tus curvasy mis atajos
No existen mapas para llegar. 



martes, 29 de septiembre de 2009


Ahora que la adolescencia es un septiembre lejano, 
humo de cerveza en un portal, un verano inacabado. 
Algunos años en la facultad de ciencias, 
papeles escritos, ron de Cuba, hojas de hierba, 
un tren dormido en una vía muerta, 
la luz de la ventana azul que siempre estaba abierta. 

Ahora que quedan tan lejos las playas de Corfú, 
las estaciones de trenes de Praga, Hamburgo o Estambul, 
los viajes que trajeron a otros vistiendo nuestros cuerpos, 
la luz de una cafetería, los amores conversos. 

Ahora que te cansas y las piscinas cierran, 
y apura el último baño la luz de las estrellas. 
Ahora que regreso a los lugares a donde quise huir 
y nadie me espera allí. 
Ahora que casi llego a fin de mes, 
que amo a una mujer. 

Que amo a una mujer. 

Ahora que pago las facturas, que me besé en La Habana, 
que sueño con Lacandona, que ya no escribo cartas, 
que cumplimos más años que promesas, 
que se hunden nuestros corazones como la vieja Venecia, 
que llego tarde a los cines y al fin del planeta, 
que alquilo un pequeño piso en un castillo de arena. 

Ahora que duelen las resacas y cortan como una navaja. 
Ahora que nadie nos saluda por los bares de Malasaña, 
que pido auxilio, besos y comida por teléfono, 
que fumo flores y lloro a veces mientras duermo. 
Ahora que tiemblo como un niño abandonado. 
Ahora que viejos amigos nos han traicionado. 

Ahora es el momento de volver a empezar, que empiece el carnaval, 
la orgía en el Palacio de Invierno, de banderas y besos. 
Se cayeron mis alas y yo no me rendí, 
así que ven aquí, 
brindemos que hoy es siempre todavía, 
que nunca me gustaron las despedidas.


Ismael Serrano. Ahora. 

En la foto, la Plaza de las Comendadoras de Madrid, que fue mi casa algunos años.

viernes, 25 de septiembre de 2009

"para descubrir no hace falta buscar nuevos caminos sino tener nuevos ojos"
Guau..... me ha gustado esta frase. Aunque no recuerdo el nombre del autor. 

domingo, 13 de septiembre de 2009

Un hechicero africano conduce a su aprendiz por el bosque. Aunque más viejo, camina con agilidad, mientras que su aprendiz resbala y cae a cada momento. El aprendiz blasfema, se levanta, escupe en el suelo traicionero y sigue acompañando a su maestro.

Después de una larga caminata, llegan a un lugar sagrado. Sin parar, el hechicero da media vuelta y comienza el viaje de regreso.

- No me has enseñado nada hoy. Dice el aprendiz, cayendo una vez más.

- Sí que te he enseñado, pero parece que no aprendes. responde el hechicero. Intento enseñarte cómo lidiar con los errores de la vida.

- ¿Y cómo se lidia con ellos?

- Como deberías lidiar con tus caídas. Responde el hechicero. En vez de maldecir el lugar en el que caíste, deberías buscar aquello que te hizo resbalar.

Maktub, Paulo Cohello.

jueves, 13 de agosto de 2009

No sigo tu velocidad...

Me reglaste las tormentas de verano y las tardes llenas de piscinas.
Era pronto y era tarde cuando nos volvimos a ver.
Recordé que me regalaste los primeros vientos del otoño, y me mudaste de piel.



Acertaste los pronombres,
Dibujaste las respuestas
Las pintaste de colores en mi espalda
antes de abrazarme con tu guerra,

Deshilaste los vestidos
Que encajados en septiembres amarillos
Me cosían las palabras de promesas.




lunes, 10 de agosto de 2009

PABLO NERUDA. AGUA SEXUAL
Rodando a goterones solos,
a gotas como dientes,
a espesos goterones de mermelada y sangre,
rodando a goterones,
cae el agua,
como una espada en gotas,
como un desgarrador río de vidrio,
cae mordiendo,
golpeando el eje de la simetría, pegando en las costuras del
alma,
rompiendo cosas abandonadas, empapando lo oscuro.

Solamente es un soplo, más húmedo que el llanto,
un líquido, un sudor, un aceite sin nombre,
un movimiento agudo,
haciéndose, espesándose,
cae el agua,
a goterones lentos,
hacia su mar, hacia su seco océano,
hacia su ola sin agua.

Veo el verano extenso, y un estertor saliendo de un granero,
bodegas, cigarras,
poblaciones, estímulos,
habitaciones, niñas
durmiendo con las manos en el corazón,
soñando con bandidos, con incendios,
veo barcos,
veo árboles de médula
erizados como gatos rabiosos,
veo sangre, puñales y medias de mujer,
y pelos de hombre,
veo camas, veo corredores donde grita una virgen,
veo frazadas y órganos y hoteles.

Veo los sueños sigilosos,
admito los postreros días,
y también los orígenes, y también los recuerdos,
como un párpado atrozmente levantado a la fuerza
estoy mirando.

Y entonces hay este sonido:
un ruido rojo de huesos,
un pegarse de carne,
y piernas amarillas como espigas juntándose.
Yo escucho entre el disparo de los besos,
escucho, sacudido entre respiraciones y sollozos.

Estoy mirando, oyendo,
con la mitad del alma en el mar y la mitad del alma
en la tierra,
y con las dos mitades del alma miro al mundo.

y aunque cierre los ojos y me cubra el corazón enteramente,
veo caer un agua sorda,
a goterones sordos.
Es como un huracán de gelatina,
como una catarata de espermas y medusas.
Veo correr un arco iris turbio.
Veo pasar sus aguas a través de los huesos.


jueves, 6 de agosto de 2009


Solo puede hablar cuando supe que no me importaba. Y aun así sentía que algo se despojaba de mí y me dejaba por fin respirar. Me sentí libre. Y fui capaz. Es increíble darte cuenta de que puedes desatarte y no duelen tanto los nudos. Compensa mucho más la liberación que la comodidad de no querer verte las marcas. Así es el ser humano, ni siquiera se preocupa muchas veces de valorarse a sí mismo. Y de pronto un día es fácil, y te encuentras sentado sin haber decidido que ése iba a ser el momento en el que los fantasmas se marchasen. En el que los dejarías ir para que no te hicieran una compañía en todo caso suficiente. ¿Tanto miedo para esto? Nuestro miedo a no decir lo que pensamos por si perdemos no debe amordazar nuestro derecho a ser nosotros mismos.  
La paz no es comparable con la continua duda. Todo el mundo merece un poco de claridad, pero hemos de buscarla. ¿Para qué esperar? Dilo y desinfla el principio de incertidumbre. Sé valiente.


martes, 4 de agosto de 2009

Aprenderé a nadar.



- He pensado que... tú y yo... podríamos ir a algún sitio, juntos... uno de estos días. Hoy. Ahora mismo. Ven conmigo, Hannah.

-  No, yo... creo que no va a ser posible.

- ¿Por qué no?

- Mmmm... porque si decidiéramos irnos a algún lugar juntos, me da miedo que un día... hoy no, quizás... quizás mañana tampoco, pero un día, de repente, puede que empiece a llorar y llorar, y que llore tanto que nada ni nadie pueda pararme, y que las lágrimas llenen la habitación, y que me falte el aire, y que te arrastre conmigo, y que nos ahoguemos los dos.

- Aprenderé a nadar, Hannah. Te lo juro. Aprenderé a nadar.

Hoy pongo un fragmento de una película que ví hace poco: La vida secreta de las palabras. La película para mi gusto es bastante lenta, pero tiene partes realmente increíbles. Como ésta. Que me hizo pensar (qué raro, ¿verdad?). Pues sí, Me hizo pensar en esa última respuesta. él no dijo nada como :pues yo te llevaré conmigo, o yo impediré que te ahogues, o yo haré que no llores o yo te sacaré de la habitación y no nos ahogaremos o yo te salvaré.  Él prefiere meterse en su vida y pasar ese sentimiento con ella, e inundarse con sus lágrimas si es preciso. Él no le dice que no llore, no le impide sentir; le dice que en ese llanto no la abandonará y no la dejará sola. Muchas veces pensamos que es necesario evitar un sentimiento, y olvidamos compartirlos, y olvidamos respetar el dolor y hacerlo nuestro de alguna forma para poder ayudar a superarlo. Porque, no debemos olvidarlo, la única forma de superar el dolor es sentirlo primero.  Muchas veces pensamos que para que alguien esté feliz con nosotros solo tenemos que decirle constantemente que debe sonreir, recordarle que la vida e smaravillosa; y es cierto que lo es, pero quizás para ganarte la confianza de esa persona, para ver un halo de luz en su rostro, debamos primero compartir su tristeza. Querer a alguien así, asumiendo sus días fáciles y difíciles, sin tirar la toalla, estando ahí aunque muchas veces no sea necesario coger la mano sino permanecer alerta, nos convierte en compañeros perfectos de viaje. ¿No? 

jueves, 30 de julio de 2009

Ya todo se comprende


Hace calor. Se deshoja la estación como las hojas de eucalipto, y en el campo huele a romero y a hierba seca. Me transporto al fin del mundo. Todo está parado. Me da por pensar que estarán haciendo ahora las personas a las que recuerdo. No sé si el mundo también estará parado para ellos. Hasta que no llegue septiembre no volverán los encuentros. Ahora parece que un huracán queda por pasar. La preocupación más inquietante es ver si tengo que ponerme bálsamo en los labios, y si me pica la sal. 

He metido todas las cosas en botes de vidrio para que puedan permanecer hasta que vuelva, y se conserven, más frías. Cuando vuelva las tocaré con mis dedos y las volveré a ablandar y haré surcos que marquen el uso que les quiero dar. Alomejor algunos botes tengo que tirarlos. Otros, quizás, necesiten un descanso. Reposo absoluto. 

No he escrito postales, no he mirado el móvil, no me he dejado agobiar por el silencio. No hay nada más que mirar más allá de las viejas luces de las casas del campo. Ellas permanecen iguales años tras año pero no sufren por no cambiar. Ni tampoco se plantean necesitar un cambio. Tampoco quienes las habitan. Conviven con sus sombras, con sus arrugas, aprenden a quererse envejeciendo y repasan una vida que les gusta y que no maldicen por no haber gastado, viajado, vivido más de lo que han tenido. Y todos los días a las 10 recogen el mismo pan y por la noche dan el mismo paseo. Tú pasas, harto de darte el paseo el quinto día seguido, y te saludan con una sonrisa. Es admirable.

Los grillos, los trozos de sandía por la noche, los palos de regaliz, las lágrimas de San Lorenzo, la luna, los consejos de mamá, la dama de noche, los cafés con papá y los golpes secos del bastón. Todo queda tan lejos, que no sé de dónde soy ni dónde tengo que ir ni por qué. Y los recuerdos se marcan en cada piedra, en cada sonido, lavan mis manos a la hora de lavar los platos, los siento en los almendros secos y en el ruido de las tórtolas. Los recojo en cada jazmín, los hilo y los devuelvo a su origen. Al tiempo. ¡Ay el tiempo!..... Ya todo se comprende. 


martes, 28 de julio de 2009

Everything is moving so fast

En latidos infinitos

desatabas la nostalgia de las cosas

y polícromo vencías arrastrando tu presente.

Casi nunca me explicabas los caminos.

Solo andabas.

jueves, 23 de julio de 2009


Ese cuadro es uno de mis favoritos de la exposición de Sorolla. 

Os dejo también algo que he leido hoy. A falta de inspiración, me permito el lujo de que me la dejen:

Ni tú eres un Edward Norton ni yo una Marilyn Monroe. Quizás por eso, aunque no me gusta el negro y tu huyes de los colores, compartimos miopía con distintas dioptrías. Remueves el café con tenedores, me arrebatas el insomnio y te pones mi bata para pintar.

viernes, 17 de julio de 2009

Podría decir que últimamente no tengo tiempo para escribir (pero eso nunca me ha hecho falta, las cosas que escribo puedo hacerlas en cualquier lugar y en los momentos más insospechados, además, mi anterior entrada era algo que yo escribí), pero de lo que realmente no tengo tiempo es de sentarme, currarme las entradas, contaros cosas interesantes... Y a veces pienso simplemente en cerrar este blog. 

Pero hoy os voy a dejar esta canción. llevo toda la mañana tarareándola y me parece muy bonita. Besitos a todos

"por el dolor al que no guardo rencor"


jueves, 9 de julio de 2009



He dejado de hacer el café de las cuatro,
Recogí las migajas que había sobre el mantel
Las tiré en la ventana,
Entré un poco en tu cuarto
Te has llevado contigo las sábanas de ayer

Y por más que lo intente mi boca 
Jamás se equivoca al decirte que no
Que los ojos me muerden la ropa
Y vigilan los dientes las sobras de dos

Me comí las migajas que guardé entre las manos
el café de las cuatro está desde anteayer,
me he vestido desnuda con el mantel de cuadros
las sábanas se asfixian debajo de mi piel.

miércoles, 8 de julio de 2009

Merezco

merezco

Efectivamente, me lo merezco por tonta.

viernes, 19 de junio de 2009


Me encontró sentada ante los leños todavía ardientes, 
abrazada a mis piernas, con la cara oculta entre las rodillas.
Se agachó a mi lado.
- ¿Qué te pasa.
- Tengo miedo.
- ¿De qué?
- De los ruidos, de esta oscuridad (…) De que nos maten a todos….
- Yo también tengo miedo, pero no me perdería esto por nada.

Le tomé la mano y se la retuve con firmeza por unos instantes. Su piel estaba caliente y tuve la impresión renovada de conocerlo desde hacía mil años.
- ¡Qué par de tontos somos!- traté de reirme.
- Cuenta una historia para distraernos.- pidió Rolf Carlé.
- ¿Cómo te gustaría?
- Algo que no le hayas contado a nadie.
 

Invéntala para mí
(…) 

Eva Luna, Isabel Allende. 



viernes, 12 de junio de 2009

Guerrero Álvarez

Hoy mi entrada va centrada en un agradecimiento. Hace poco puse una frase de Javier Álvarez en el blog, “pido las nubes que alientan mis poemas”, sacada de una entrevista, y me envió un comentario con el enlace de la canción. La verdad es que me he quedado muy sorprendida, y cabe la posibilidad de que no sea él y alguien me la haya mandado con su nombre, pero también cabe la posibilidad de que sí sea. Y es de agradecer que alguien se pase por tu blog para ver algo que pongas sobre él…. He mirado en Internet alguna página oficial para darle las gracias, pero no me sale nada…. Y en el myspace no estoy registrada. Así que espero que lea esto. Tenía guardada una entrada sobre él en borradores y creo que hoy es el momento de ponerla. 

“Ciega fe”, como una de sus canciones, es lo que tengo en este hombre. Los que me leéis podéis haber visto que me gustan los cantautores, me gusta la gente que compone y que transmite…. Me gusta escuchar lo que me quieren decir y por qué. Escucho a Javier Álvarez desde que tengo probablemente 15 años, y ya tengo 25. Tengo CDs pero sobretodo casettes que guardo y escucho con cariño, que me regalaban cuando era una chica de quince años un tanto rara a la que le gustaba escribir, pensar, y las canciones de Javier Álvarez, cuando lo que se llevaba era Take That (todos mis respetos para ellos, que me gustan, además, pero siempre fui un tanto diferente). Recuerdo escuchar Sunset Boulevard a todo volumen en el autobús del colegio, recuerdo escuchar “fantasma”, “ya no te acuerdas de mí”, “se cuela”, y muchas más, incluso sus versiones en otros discos, como en el de Aute, cantando “sin tu latido”. 

Hoy estoy contenta, porque es una persona a la que realmente admiro, y considero que ha puesto letra a momentos de mi vida. No solo de la suya. ¿Sabéis lo que siempre digo de las cosas que escribo? La máxima satisfacción de escribir es que alguien sienta lo que escribes como suyo, y saque su propia conclusión. La poesía no tiene un solo significado en la pluma de quien la hace, tiene mil en cada uno de los ojos que la leen.



Y aquí mi entrada en borrador: 


"Es una de esas personas que te hacen pensar….


- Que no se puede mezclar magia con anestesia. 

- Que los estereotipos no tienen por qué ser lo único que vende

- Que uno puede ser absuelto aun siendo como es.

- Que no tienes por qué salir en una emisora conocida para ser un buen músico. El éxito, afortunadamente, no es lo mismo para todo el mundo. 

- Que somos la respuesta de aquello que nos mueve por dentro. Y transmitirlo es una obligación.UNA OBLIGACIÓN, no solo un derecho. 

- Que ser diferente es una opción tan respetable como otra cualquiera

- Que hay épocas para todo. Lo importante es ser consecuente con la fase en la que estás.

- Que sí se puede mezclar la mierda y la fantasía. 

- Hay cosas que solo se pueden decir de una manera. Ni la mejor ni la más cómoda. La única. 

- Los ideales no se venden. Y venderlos no significa no respetar otras opciones

- Los desequilibrios vitales muchas veces te llevan al equilibrio

 - La sensibilidad se cuela, se filtra... 

- La música es un arma, la letra es un instrumento tan fuerte como la guitarra.

- Uno puede decir lo que piensa, y pensar siempre lo que dice…


No te tiene por qué gustar su música, ni siquiera haberla escuchado nunca. La identificación es la base para que entendamos el significado de lo que hace. Crecí sintiendo esa identificación, con un chico tímido que a veces alentaba canciones de protesta, con su peculiar forma de transmitir lo que nadie podría haber hecho mejor, con su manera de sentir y de escribir. Con sus cambios y sus múltiples registros. Por eso para mí es uno de los mejores. Porque para ser capaz de seguir aquí a pesar de tantas críticas, hay que ser sencillamente Javier Álvarez."

miércoles, 10 de junio de 2009

Pongamos que hablo....


Madrid es un agujero lleno de hormigas. Los incansables nunca duermen, las viejas abuelitas van con sus carritos de la compra de cuadros verdes y los coches siempre pitan… Eso es así. Pero entre tanto barullo se esconden las pequeñas cosas. Las lámparas de las casas que asoman por la ventana, la sequedad del suelo, las grandes avenidas y las calles pequeñas llenas de objetos curiosos, telas, libros y bares distintos.

En Madrid no existen los nombres ni las caras, ni las formas de vestir. De hecho, prácticamente tú no existes. No te diferencias por tu forma de andar, ni de tomarte el café, ni de pintarte los labios, ni de pagar la cuenta. Tampoco importa si cantas por la calle o te ríes en los semáforos. 

En Madrid puedes ser tú o ser otro distinto, incluso ser dos personas a la vez. Puedes ser tu vecina, la revisora de la zona verde o Miguelito el del bar…. Que aún no se ha quedado con tu cara….. Puedes ser la pareja que ves todos los días volviendo del trabajo, con la rutina incorporada al traje de chaqueta, o la chica que canta mientras mira los yogures en el supermercado. Puedes ser seis fotos a la vez con la misma falda estampada. 

Por eso muchas veces es difícil centrarse en uno mismo. Y lo más curioso es que termina siendo mágico. 



martes, 2 de junio de 2009

Tú me llevas



Y correr por las líneas de la mano....

P.D: ¡ya tengo el disco! Y soy una obsesiva escuchando todo el día esta canción...

martes, 12 de mayo de 2009

Qué profundo y sin domar

Cuando las historias señalan canciones y las canciones reviven historias, lo que se cuenta no forma parte de una vida, sino de muchas. Y los impulsos no pueden guardarse, han de convertirse en materia.

Me da la sensación de que Antonio Vega también tenía una cueva, inmensa, mucho más grande que la mía, de la que nunca pudo ni quiso salir. Ojalá todos fuéramos capaces de adaptarnos a los golpes de la misma manera. A pesar de ello, al igual que la tristeza crea grandes poetas, las abolladuras en la piel y en el espíritu crean grandes canciones.

Porque lloraste con algo que contó en lo que veías una parte de ti, lloras aunque no lo conozcas, aunque tengas solo un disco apilado entre muchos. Y de vez en cuando, en las tardes de mirar por la ventana, te da por poner “El sitio de mi recreo”. Desde aquí mi profunda admiración. Los compositores como él con sus letras hacen muchísimo más que música. Construyen, destruyen y reconstruyen almas.
Esta canción es un soneto de otro Antonio.


A trabajos forzados me condena
mi corazón, del que te di la llave.
No quiero yo tormento que se acabe,
y de acero reclamo mi cadena.

No concibe mi alma mayor pena
que libertad sin beso que la trabe,
ni castigo concibe menos grave
que una celda de amor contigo llena.

No creo en más infierno que tu ausencia.
Paraíso sin ti, yo lo rechazo.

Que ningún juez, declare mi inocencia,
porque, en este proceso a largo plazo,
buscaré solamente la sentencia
a cadena perpetua de tu abrazo.

No creo en más infierno que tu ausencia.
Paraíso sin ti, yo lo rechazo.
Que ningún juez, declare mi inocencia


martes, 5 de mayo de 2009

“pido las nubes que alientan mis poemas”,

ha dicho Javier Álvarez en la presentación de su último disco, “Guerrero Álvarez”. 


…. Y hoy creo que con esta frase ya está todo dicho

jueves, 30 de abril de 2009

La danza es maravillosa, te pinta de colores. Te hace crecer, te hace creer en ti misma. Te estimula, te da confianza, te hace grande. Te ves grande. Te quita velos, te da un aroma nuevo, sensualidad, feminidad, armonía, ritmo, te descubre y te abre como un libro. Te expresa, te dispersa, te tiñe los ojos y los labios de luz, te saca brillo, demuestra tu belleza exterior, interior, esa que casi nunca sacas, sumergida en la vorágine del ordenador, del móvil, del trabajo, de la casa….

Pero cuando te metes en ella no llegas a comprender dónde poner el freno. El sueño de todas nosotras, de todas las aficionadas es bailar bien, como una profesional, por eso y para eso pagamos las clases. Creo, además, que dentro de las clases deberían hacerse grupos, según las necesidades: hay mujeres cuya intención es ir a clase a divertirse, no a aprender, hay otra que van solo a aprender, y no disfrutan, hay otras que van únicamente por mantenerse en forma, el cómo les da un poco igual, harían danza igual que hicieran aerobic todos los días… No es lo mismo, y sin embargo todas pagamos lo mismo (porque cuesta un dinero) por cosas diferentes. 

Ojalá pudiera ser bailarina. Pero soy abogada. Cada uno debe ubicarse en lo que es. Me fastidia, pero no puedo llegar a trabajar después de 4 horas de ensayo, no puedo decir que me tengo que ir a bailar fuera de Madrid cuando a la semana siguiente tenga un juicio…. Por supuesto que he renunciado a cosas por bailar, ¡es mi pasión! Y lo he hecho encantada… No es placentero salir de trabajar, agotada, a las 9 e irte a clase, hasta casi las once. Luego vete a tu casa y ponte a planchar…. Pero, aunque sé que en este momento podría plantearme dedicarme más en serio a esta faceta artística, también hay que saber decir que no. Y yo hoy he dicho que no a una pasión, entrar en una compañía de danza, por otra pasión que me da comer. Y ha sido difícil, pero la falta de tiempo me hace no poder compaginar las dos cosas. Seguiré con las clases regulares y con talleres…. Y para mí todas las mujeres somos bailarinas, ¡yo bailo en mi casa, me visto y todo, hago fusiones, qué mejor escenario! Bailo para mi familia, para mis amigos… ¡qué mejor público quiero! Estoy algo triste pero creo que he hecho lo correcto. 
Yo he sacado de mí misma cosas mucho más provechosas bailando en mi casa o para mis amigos que en una academia. No olvidéis esa frase: para mí, todas las mujeres somos bailarinas, aunque no seamos profesionales. 


miércoles, 29 de abril de 2009

Alomejor desaparezco de tu vida. Me tomo un descanso y cuento hasta diez. Te recito mientras sale el avión y leo algo que me ayude a olvidar mientras me tomo un café. Alomejor desparezco de tu vida cuando menos te lo esperes, cuando me encuentre preparada para empezar a desaparecer poquito a poco, cuando lo haya meditado tanto y tantos años que no encuentre mejor solución, cuando me duela mucho mucho y me lo repita bajito bajito todos los días hasta que el último pegue un grito.

Alomejor desaparezco de mi vida. Cuando no tenga miedo a dejarme llevar, cuando aprenda a mezclar poesía y realidad,
cuando la pinte de colores, cuando me pinte de colores, cuando te pinte de colores. Cuando cambie de monedero, cuando no me encuentre cansada, cuando reconozca que ha pasado el tiempo.

Alomejor desaparezco. Cuando recuerde quién soy, cuando me de tanta rabia lo que encuentro que quiera cambiarlo, cuando me regales lo último que te quede, cuando sepa que puedo volar.

Y alomejor me quedo.  

Cuando sea valiente.


jueves, 23 de abril de 2009

La Diada



 Una tradición y un montón de recuerdos. 23 de abril. 

 Me gustaba ese día porque cantábamos en la misa mis hermanas y yo, con un profundo respeto y cariño por nuestra segona terra. Porque a mi padre se le ponía una sonrisa de oreja a oreja, porque mis padres salían a cenar con sus amigos y yo después de la celebración me escaqueaba y podía estar más rato en la calle, porque yo siempre leía en la misa de la Virgen de Montserrat y mi padre me miraba orgulloso, y porque era muy gracioso y bastante ejemplar ver a mi malagueña madre cantar en catalán y amar una tierra que no era la suya (y que, admitámoslo, en poco se parecen). 

 Mi padre me ha enseñado a amar de dónde vengo, a respetar siempre mis raíces, cuidarlas, conocerlas, recordarlas y compartirlas. Como él magistralmente ha hecho siempre, a pesar de ser un “emigrante”

 Gracias y feliz día de San Jordi, papá. 
 

Rosa d’abril, Morena de la serra,
de Montserrat estel:
il•lumineu la catalana terra,
guieu-nos cap al Cel.

Amb serra d’or els angelets serraren
eixos turons per fer-vos un palau:
Reina del Cel que els Serafins baixaren,
deu-nos abric dins vostre mantell blau.

Alba naixent d’estrelles coronada,
Ciutat de Déu que somnià David,
a vostres peus la lluna s’és posada,
el sol sos raigs vos dóna per vestit.

Dels catalans sempre sereu Princesa,
dels espanyols Estrella d’Orient,
sigueu pels bons pilar de fortalesa,
pels pecadors el port de salvament.



lunes, 13 de abril de 2009

Siempre estabas junto a mí, en mi mente revolviendo todo...

Hay quien escondía los caramelos dentro de los bolsillos, y yo mientras tanto cogía margaritas sin que mi madre se diera cuenta y me las metía dentro de los míos, aunque se me olvidaba quitarlas y al final del día salían todas desperdigadas en el baño. Mamá no me regañaba, solo me miraba con cara de resignación, y me decía: “ya sabes que las flores dan mucha alergia”. Y yo me metía en la bañera llena de espuma y jugaba con los botes de gel.

A veces me caía porque todos los balones salían a mi encuentro. Era torpe y no trepaba por los árboles, me gustaba subir y bajar escaleras, y sentarme en ellas a escribir. Cuando pasó el tiempo seguí sentándome en ellas, y a veces cuando giraba la cabeza estabas tú, que acababas de llegar de Madrid, que me parecía otro planeta. Ya no me preocupaba no saber trepar por los árboles, aunque al saltar una valla por seguirte me caí y me hice mucho daño.

Al cabo de los años en esa valla te miré a los ojos.

Recuerdo que venías a buscarme, yo me escondía en mi cuarto porque me parecías un pesado, y porque me gustaba estar sola. Con el paso del tiempo, tú venías a buscarme, y yo me escondía en el baño porque no podía volverte a mirar.

Cambiamos las margaritas por jazmines, las risas de verano por cartas, y un día me contaste un secreto sentada en las escaleras donde escribía. A partir de entonces me llamabas solo para que pudiera escuchar los acordes de la guitarra con la que sacamos alguna voz en El Retiro, y luego bajamos por la Cuesta de Moyano… con la que me compusiste una canción, cuando Madrid dejó de parecerme tan lejano, aunque siga pareciéndome otro planeta. Cuando me acerqué me alejé de ti. Te alejaste de mí.

La abuela siempre decía que eras distinto a los demás. Hoy apenas te reconozco.

Contigo me di cuenta de que hay cosas que es mejor que nunca cambien. Contigo dejé de ser una niña rara para sentirme bien recorriéndonos el mundo con nuestra pinta de “especiales”. Me explicaste en el autobús cuál es la diferencia entre ser raro y ser diferente. Y dejé de sentirme un extraterrestre. Y supiste hacerme ver qué era una estrella. Contigo me di cuenta de que habíamos crecido. Y de que si algún día nos pasaba algo querría volverte a encontrar. Contigo aprendí a pensar. Contigo aprendí que prefiero los abrazos a los besos.

Por ti me llevé la primera y única bofetada de mi madre, y pasé un verano entero sin salir. Eran tristes y largas las tardes de verano. Ya no había vallas que saltar, ni había “un dos tres, gallito inglés”, ni cogíamos almendras, ni me ayudabas a coger jazmines cuando estaban muy altos. Y te hice daño. Y te hice llorar… Y no de felicidad. Y para colmo tú no me entendías, y yo no me lo sabía explicar.

Antes vivíamos lejos y éramos incansables el uno con el otro. Ahora vivimos cerca pero solo nos encontramos en el metro. En Madrid no se ven las estrellas.

Cuando vuelvo al campo recuerdo los lugares comunes y el olor de la casa de la abuela. Nunca coincidimos, y cuando estás reconozco que evito verte. Y tú a mí, es algo que se sabe... Quizás porque hemos seguido creciendo. Y nunca estamos solos para poder contarte todo esto. Pocas veces he vuelto a ver margaritas por el camino. Pero el otro día ví el campo poblado de margaritas. Según bases científicas puede ser que es porque este invierno ha llovido, me gustaría pensar que eres feliz. No cogí ninguna para metérmela en los bolsillos, con el paso del tiempo también me he dado cuenta de qué sabias son las madres…

Es una tontería, pero no quiero volver a sentarme en esas escaleras sin ti. Ni siquiera diez años después.

lunes, 6 de abril de 2009

manifiesto desastre

- Me encanta que hayas idealizado nuestra trágica situación.

- Cuando no estás todo me parece divertido.

- Solo me estoy llevando ostias.

- Pero cuando estás lo veo un poco menos claro.

- Lo ves menos claro porque es de noche.

- Así que prefiero que no estés. Es mucho más fácil autoconvencerme de que no lo necesito. Además,

cuando estás, me lo paso bien. Y eso no es bueno.

- Yo no soy especial.

- Tú no eres comparable.

- ¿Quieres más?

- Vamos a quemar Madrid.

- Ni siquiera me lo planteo.

- Me tengo que ir.

- ¿Estás incómodo?

- Me gusta cómo mueves las manos.

- Lo he intentado todo.

- Ah, ¿no te lo planteas?

- No te voy a llamar.

- Entonces, ¿qué pasó con ese chico?

- No te creo.

- Ya sé en qué trabaja tu padre.

- Qué poco importante soy para ti.

- Guapa.

- ¿Por qué?

- Ya sabes que soy complejo.

- ¿Por qué? (una y otra vez)

- Duele más olvidarte que odiarte o amarte

- Rubias de ciudad venían en el autobús a pedir otra oportunidad

- Que no quiero olvidarte.

- No me has vuelto a llamar.

- No lo sé.

- No entiendo por qué te gusta tanto potenciar nuestros defectos.

- Es más fácil.

- Apagas la luz y todo me parece caracterización.

- Me meto en el papel. No sé hacerlo de otra manera.

- Un, dos, tres. Acción.

- Corten.

- Me he vuelto a equivocar.

domingo, 5 de abril de 2009

Emociones para vivir

Hoy me he puesto a pensar en todo lo que me gustaría hacer y no tengo tiempo. Tengo un problema porque me suele gustar casi todo. Por ejemplo, ayer estuve en un curso de maquillaje para espectáculos (para el espectáculo de danza) y me encantó... Y si pudiera estudiaría Filosofía, Psicología, Clásicas, Arte,... hay tantas cosas interesantes por aprender! Como no tengo tiempo de hacer todo eso, una buena forma de aprender es leer cosas sobre todo lo que me llama la atención. A veces me compro libros de filosofía, otras veces de psicología... Y es curioso ver cómo hay cosas que tienen muchísima relación entre sí en diferentes materias. Por ejemplo, yo que me dedico al derecho, tuve que estudiar en su día los fines preventivos y de reinserción de las penas, y ahora me encuentro con capítulos enteros hablando sobre eso en un libro de Psicología, y es muy interesante, porque no solo puedes comparar los diferentes prismas desde los que ha de analizarse un delicuente o la pena a imponerle y el por qué de la misma, sino que te sirve muchísimo para complementar tu limitado conocimiento, únicamente vinculado a las aulas de derecho. No voy a entrar en un debate criminológico, podría tirarme horas hablando, porque si hay algo que me gusta de verdad de mi profesión es todo lo relacionado con la criminología, y eso sí que espero poder estudiarlo más a fondo algún día.

Os voy a dejar fragmentos del libro que ya estoy terminando de Punset, y que me ha dejado fascinada. ¡Feliz domingo de ramos!

Tomamos decisiones todos los días. Desdeluego, algunas más trascendentes que otras. Podemos acertar o equivocarnos en cada una de ellas, pero nos gusta creer que cada decisión es el producto de un análisis objetivo, frío y racional. Hemos construido un mundo que favorece la ausencia de emociones en la toma de decisiones. Desdeñamos las emociones porque las consideramos un estorbo, una especie de niebla que nos impide ver los hechos con claridad... pero la realidad es muy distinta.

Las emociones son el resultado de un conjunto de procesos fisiológicos que suceden en nuestro organismo: la felicidad, la vergüenza o la culpa son química en nuestro cerebro... ¡Simplemente son cambios moleculares!No podemos eliminar las emociones de nuestro cuerpo: forman parte de nuestra propia biología. La forma en que nuestro cerebro percibe estos cambios es lo que llamamos sentimientos o sensaciones. Son esenciales para solucionar problemas que requieren creatividad o que deben elaborar y procesar grandes cantidades de información. Y, por tanto, nos ayudan a decidir.

Las personas con lesiones en una zona específica del lóbulo frontal del cerebro son aparentemente normales, hablan perfectamente y su cociente intelectual es normal, pero toman decisiones equivocadas. En estos casos la zona del cerebro responsable de los sentimientos y las emociones está dañada, y las consecuencias son graves: pierden su trabajo, rompen sus matrimonios... Simplemente, parece que todo lo que sucede a su alrededor no ,es afecta emocionalmente. Saben que actúan mal, pero no le simporta: carecen de sentimientos de vergüenza y culpa.

Vivir es mucho máss fácil si se tienen emociones y sentimientos. Y si éstos son adecuados, aún sería más cómodo y placentero. Aprender y recordar también son tareas mucho más simples cuando van acompañadas de una emoción. Cuando existe una lesión en esta zona del cerebro, la persona no puede utilizar los recuerdos asociados a emociones y puede traicionar a un amigo sin ningún remordimiento.

Decidir sin sentir nada es quizás el sueño de un verdugo, pero para la mayoría de los mortales es una situación indeseable. Emoción y sentimiento van ligados a la especie humana y nos ayudan cada día a decidir qué queremos hacer con nosotros mismos.

jueves, 2 de abril de 2009

Una contínua prueba de esfuerzo

Hace muchos años que me enamoré de esta canción. Me trae muy buenos recuerdos, y me aporta fe. Sí, parece una tontería, pero me hace creer que alguien en el mundo alguna vez sentó un principio básico de toda relación tal cual es soportar. Amar la oscuridad del otro, no solo la luz. Porque no solo existe la luz. Y eso lo hizo porque creía en el amor. En el amor con grietas, en el amor con heridas y cicatrices, en el amor lleno de personas con pasado, de personas distintas a nosotros. En la aceptación de que el amor no solo depende de cuánto estás dispuesto a ser feliz (pregunta estúpida), sino también de cuánto estás dispuesto a sufrir. Y lo más gracioso del tema es que esa decisión no nos pertenece, depende del momento en el que cada persona se encuentre, y algunas veces ni siquiera es cuestión de sentimiento, sino de capacidad.

¿No es maravilloso?




I can be an asshole of the grandest kind

I can withhold like it’s going out of style
I can be the moodiest baby that you've ever seen
And you've never met anyone
Who is as positive as I am sometimes

I am the wisest woman you've ever met.
I am the kindest soul with whom you've connected.
I have the bravest heart that you've ever seen
And you've never met anyone
Who's as positive as I am sometimes.

You see everything, you see every part
You see all my light and you love my dark
You dig everything of which I'm ashamed
There's not anything to which you can’t relate
And you’re still here

I blame everyone else, not my own partaking
My passive-aggressiveness can be devastating
I'm terrified and mistrusting
And you’ve never met anyone as,
As closed down as I am sometimes.

You see everything, you see every part
You see all my light and you love my dark
You dig everything of which I'm ashamed
There's not anything to which you can’t relate
And you’re still here

What I resist, persists, and speaks louder than I know
What I resist, you love, no matter how low or high I go

I'm the funniest woman that you've ever known
I am the dullest woman that you've ever known
I'm the most gorgeous woman that you've ever known
and you've never met anyone
Who is as everything as I am sometimes

You see everything, you see every part
You see all my light and you love my dark
You dig everything of which I'm ashamed
There's not anything to which you can’t relate
And you’re still here

And you’re still here
And you're still here...

martes, 24 de marzo de 2009

tus almendras dulces


De haberlo sabido te habría dicho que no teníamos tiempo que perder
De haberlo sabido te habría arrancado la ropa.
A ti te gustaban las almendras dulces.

Y yo te hice un bizcocho enorme lleno de almendras dulces.

pero ayer el sofá estaba vacío
la calle estaba tensa de equipajes
los cines llenos de parejas besándose
Y yo tenía un bizcocho enorme de almendras dulces


pero ayer los cuadros no parecían los mismos

y me miraba el silencio pidiéndome explicaciones

Yo solo quería un cumpleaños feliz

y muchas caras llenas de dulce satisfacción como tus almendras dulces.

pero había relámpagos en las flores
y fuego en las trampas escondidas

Las mil y una noches no solo fue un libro

sino cada una de las almendras dulces que nunca probé contigo.

viernes, 20 de marzo de 2009


Sin duda, la mejor noticia del día.... ¡Vuelve Barrio Sésamo!

miércoles, 11 de marzo de 2009


Con viento del este hiciste una cama,
soplaste sobre ella para templarla
y con el murmullo de tu voz de agua
me cantabas nanas sin letra.

Y dormíamos tan juntos que amanecíamos siameses,
y medíamos el tiempo en latidos.
Y en tus dedos yo tocaba mis canciones,
dedos de teclas de celesta.

Y tu pulso tamborileaba en mis sienes y muñecas
como diminutas patas de ciempiés,
y nos repartíamos los labios y los dientes y el hipo
y del alfabeto las impares.

Y en tus dedos yo tocaba mis canciones,
dedos de teclas de celesta.

Y en tus dedos yo tocaba mis canciones,
dedos de teclas de celesta.

(Maga- diecinueve)



lunes, 9 de marzo de 2009

Nosotros mismos

Tarde pero vuelvo, para escribir y pensar. 

Se encerraban tras la puerta y se quejaban continuamente de sus sueños, partían los pomos de las puertas y los echaban al fuego. Nadie dijo que la realidad fuera tal y como esperaban, nadie les explicó contra quién tenían que luchar. Orgullosos de sí mismos amanecían en los parques, disfrutaban robando tiempo, alardeaban de sus cuerpos y sus historias, y se creían más importantes que nadie. Cuántas veces les dijeron por dónde tenían que empezar… Se volvían esquizofrénicos, se saltaban el metro, fingían el placer y el dolor, rompían las paradas de autobús, pegaban chicles en las paredes. Pisoteaban los cigarros, bailaban sobre sus colchones de plumas y quemaban los coches. En el fondo, jugaban al escondite, se reían de las mismas cosas y lloraban por las sillas abandonadas. Y por las noches vacías, y los días secuestrados. Se ataban sogas al cuello para poder sobrevivir y vivían por encima de sus posibilidades, negaban cualquier tipo de renuncia y repetían las mismas pautas para no ser diferentes. No sé cuándo se dieron cuenta de que éramos nosotros mismos.


miércoles, 25 de febrero de 2009

Ella y él

Ella daba y quitaba razones, como recortables, para decir que no.
Él se recorría la ciudad buscándola sin saber dónde vivía. 

Ella se quitaba la mascarilla del pelo,

él se preguntaba qué estaría haciendo. 

Ella se fumaba un cigarro en la ventana con la mirada en ninguna parte, 
él estudiaba filosofía. 
Él la puso al borde del infarto cuando le dijo que la iba a besar. 
Ella tenía miedo y no estaba preparada para volver a equivocarse. 
Ella decía frases categóricas que ni siquiera se había planteado, 
él las repetía en tono irónico y se iba a casa a las 7. 
A él le gustaba su vestido. 
A ella le gustaba su forma de caminar, su inteligencia, su manera de mirarla y sus manos. 

Él vomitaba esfuerzos y se cansaba,

ella no daba opciones y huía con los ojos, las palabras y los gestos. 

Ella daba vueltas alrededor de un círculo que no le conducía a ninguna parte. 
Él saltaba al centro y le tendía la mano. 
Ella no apartaba la vista de la cuerda circular. 
Él era inmenso en soluciones, en querer vivir y amar. 
Ella bailaba con miedo, soñaba con miedo, trabajaba con miedo, pensaba con miedo, caminaba con miedo, vivía con miedo. 
Él quería sol. 
Ella quería lluvia. 
Ella imaginaba. 
Él se daba ala oportunidad de realizarlo. 
Él se marchó. 
Ella se fuma un cigarro en la ventana con la mirada en ninguna parte… 

jueves, 19 de febrero de 2009

Hola a todos…. Después de tiempo de silencio vuelvo a la carga. Espero que no me hayáis olvidado. Yo no lo he hecho de vosotros ni de mi objetivo al escribir aquí, pero a veces el tiempo nos hace tener que aparcar las devociones para cumplir con las obligaciones. En estas semanas he ido a muchos sitios, pero no me traigo esta vez nada demasiado interesante que destacar. En los ratos en las estaciones y aeropuertos varios me he ido leyendo un libro que os recomiendo, a pesar de que a simple vista pueda parecer denso: “El alma está en el cerebro” de Punset. Y a raíz de esto os pregunto dónde creéis que está el alma… El libro es buenísimo, si os gusta un mínimo la psicología, claro, porque se basa principalmente en todas las charlas del programa Redes. Hay una cosa que me ha llamado especialmente la atención, y es que lo último que la memoria es capaz de recordar es la música… Curioso, ¿no? Y otra cosa que me ha llamado la tención es la afirmación de que el hombre sí que cambia… Yo estaba convencida de lo contrario, y de hecho creo que a pesar de lo que diga Punset, lo sigo estando. 

Más cosas. En un intento fallido de ir a ver a Bacon (no voy a hacer ninguna cola de mil metros para ver a nadie, lo siento, mis nervios no me lo permiten), acabamos en el Círculo de Bellas Artes divisando desde la terraza las vistas más impresionantes que he podido observar de Madrid, con esas estatuas encima de los edificios en las que nunca nos fijamos, las cúpulas, los tejados. Un Madrid desde arriba que se presenta incluso más interesante que el Madrid de los pies en el suelo. Y ya que estábamos vimos una exposición de Picasso, y pos supuesto comí tarta de manzana… me encanta la tarta de manzana.

Y ya para acabar un poquito de promo de un grupo cordobés con el que estoy perdiendo la objetividad de lo absolutamente buenos que son. Acaban de grabar canciones nuevas, y os dejo el link de myspace: www.myspace.com/losalimentos para que los escuchéis. A mí me gusta mucho “Ian” (la canción) y “ella y él”. Si no os gusta el pop indie (planetas, lory meyers….) absteneos. 

Un besito a todos. ¡Prometo pasar pronto!