“El cambio de escala es a veces una cuestión de supervivencia. Primero vemos la montaña y luego dibujamos una línea en el mapa. Así, línea a línea, formamos la cordillera que no podemos abarcar con los ojos y, solo a través del ejercicio de la reducción, somos capaces de trazar un camino, tal vez, también, de transitarlo. De todo lo que nos importa y no comprendemos terminamos por dibujar un mapa, alterando al hacerlo el verdadero tamaño de nuestra ignorancia.”

jueves, 5 de agosto de 2010

Un tiempo


 

Este sábado, por fin, me voy de vacaciones. Estoy muy muy cansada. Aunque en vacaciones no descanso mucho porque ando de arriba abajo visitando familia, hay demasiadas cosas que nunca dejo (y creo que nunca dejaré de echar de menos). Me reconfortan las voces, los olores, el tacto… Es como una regeneración, un regreso necesario. Sé que estos meses tengo el blog muy abandonado, que escribo poco y rápido, que ya no queda ni rastro de las primeras entradas…. Lo sé. La cueva no esta pensada para ir disminuyendo, y, sin embargo, a duras penas se mantiene en pie. Nunca me ha gustado decaer, prefiero abandonar antes de morir. Sin embargo, hay algo que me mantiene aquí. No he preparado nada para el tiempo que no voy a estar, pero lo he hecho a propósito. La cueva también se va de vacaciones. En septiembre ella y yo decidiremos si sobrevivimos o nos retiramos a tiempo.

 

Cuidaos y sed felices. Mil besos a todos los que aún me siguen leyendo y opinando sobre mis entradas... Nos veremos cuando vuelvan el otoño y las mariposas


lunes, 26 de julio de 2010

La cueva está sola y vacía….. Me mira desde dentro y llora. Chirría de grietas y de humedad. Me queda mucho por limpiar, mucho calor que sentir, muchos días que ver el reflejo del sol. La cueva me mira y me reprocha su existencia, da golpes sin que yo me de cuenta, me grita con sonidos que tiemblan al paso de mis pies. La cueva duele. Me abraza pero siento frío. Me quiere para ella sola. A veces me enfado con el eco y me voy, dentro, más adentro todavía, donde ni siquiera la cueva me encuentra. Donde no hay reflejos, ni días, ni horas, donde no hay tiempo ni….. vida. La cueva resiste mis enfados con resignación, pero cada vez que me pregunta por qué me doy medio vuelta y hago como que no la he escuchado. La cueva y yo no sabemos quiénes somos ni por qué tenemos que salvarnos la una a la otra.

viernes, 18 de junio de 2010

Abrirlo fue mucho más que dejarte entrar para destrozarlo.

Abrirlo fue recordar que podía hacerlo,

Aniquilar el miedo, dejarme el odio atrás.

Abrirlo dolió mucho y fue muy sincero.

Abrirlo me concedió otra oportunidad.

 

Cerrarlo dolió más, fue poco a poco,

Chirriando con cada caricia que esperaba,

Agotado de los sueños que no llegaron

Y de las promesas que eran tan solo eso.

Ilusión.

 

Me deshice y me estrujaste.

No tenías ningún derecho….

 

¿Dónde está mi corazón?

Déjame que lo envuelva lleno de cicatrices abiertas

Y se lo entregue a quien quiera amarlo.

Dámelo ensangrentado y sin esperanza

Para que lo ponga al sol y lo limpie de decepción.

He aprendido la lección y solo quiero volver a casa.

viernes, 11 de junio de 2010

Perdóname por ir así buscándote

tan torpemente, dentro

de ti.

Perdóname el dolor, alguna vez.

Es que quiero sacar

de ti tu mejor tú.

Ése que no te viste y que yo veo,

nadador por tu fondo, preciosísimo.

Y cogerlo

y tenerlo yo en alto como tiene

el árbol la luz última

que le ha encontrado al sol.

Y entonces tú

en su busca vendrías, a lo alto.

Para llegar a él

subida sobre ti, como te quiero,

tocando ya tan sólo a tu pasado

con las puntas rosadas de tus pies,

en tensión todo el cuerpo, ya ascendiendo

de ti a ti misma.

 

Y que a mi amor entonces, le conteste

la nueva criatura que tú eras.

 

Pedro Salinas

Un regalo para este viernes.... Perdón por las ausencias, nunca de espíritu, que siempre está aquí en la cueva... Os dejo un poema sencillo, que no simple. Maravilloso como un milagro, profundo y cálido. Para que lo guardéis como un pañuelo bordado o como las páginas amarillentas de un libro antiguo. O como la mejor foto de vuestra propia alma. 

martes, 18 de mayo de 2010

Dijo que me había ido.

Dijo que otra vez había desaparecido.

Y me ví cenando sola en el japonés de la esquina

Mezclando sake con tequila

Sin saber dónde buscar.

 

Déjame hacerte bonitas las tardes de noviembre.

Ámame siempre así. Sin caretas conformadas por los años.

Llévate mi pulso por las mañanas.

Hazme café y el amor al mismo tiempo.

Quiero regalarte un mundo carente de estrategias,

lleno de naves espaciales en las que volar.

Déjame regar las hojas secas que nunca barriste.

Cuidarlas como si estuvieran vivas,

solamente porque siguen plantadas en la tierra.

No he encontrado un suelo donde aterrizar.

Déjame pedirte por las noches que no me dejes sola,

no he encontrado un sueño donde te vuelva a matar.

Quiero ser poesía e infarto.

El mío no.

Mientras mis canciones envuelven tus cicatrices

he vuelto a componer los trozos de este engaño.

Hay quien dice que nunca podría ser igual…

Tu tiempo sí

Déjame que cosa todos los fracasos

con los hilos que sobren te haré un nuevo guión.

No quiero que me sorprendas pidiéndote perdón.

viernes, 30 de abril de 2010

primera parte de una idea por desarrollar

La historia de tu vida, dos espejos sin limpiar, tres balcones con sequía, una noche sin jugar. El alcohol de las heridas, las espinas que sacar, los pellejos que sobraban  de la piel de nuestro azar. El adiós que no creías Otro martes que quemar. Nuestras viejas pesadillas. Las miradas que te fumas Cuando tratas de olvidar.Él lo sabía, No había nada que esperar,Ni conjugar ningún verboCon alguien a quien amar.

miércoles, 14 de abril de 2010

Quiero una casa encantada con espejos redondos y lunas de aceite. 
Quiero tus ganas vagando por las escaleras de cada planeta y que vuelvas a verme sentada en los ojos de cada estación. 
Quiero campanas gritando llamando a morir, a morirse el silencio, 
quiero refugios de menta y de siempre, tu voz. 
Quiero alejarme y que el mundo recuerde mi nombre, 
quiero perderme y que huelas mi ropa en la silla de cada septiembre donde comencé. Quiero soñar por las calles sin saber a dónde, 
quiero ser dónde, ser cuándo y entender por qué. 
Quiero llorar sin parar durante horas enteras y que no me pregunten ahora qué es posible hacer. 
Quiero mis antecedentes y mis primaveras, 
y eso ni se recupera ni se vuelve a ver. 
Quiero viajar encerrada en la nave del tiempo y quedarme siempre donde fui feliz, 
entre hojas de otoño y besos eternos, 
hoy quiero ser débil para renacer. 

jueves, 8 de abril de 2010

Pensión compleja

Antes que nada, perdona si huele un poco a cerrado, hacía mucho tiempo que nadie se alojaba aquí, y menos aún con la intención de quedarse. 

Ábreme bien de puertas y ventanas. Que corra el aire, que entre tu luz, que pinten algo los colores, que a este azul se le suba el rojo, que hoy nos vamos a poner moraos.

Y hablando de ponerse, vete poniendo cómoda, que estás en tu casa. Yo, por mi parte, lo he dejado todo dispuesto para que no quieras mudarte ya más.
Puedes dejar tus cosas aquí, entre los años que te busqué y los que te pienso seguir encontrando. Los primeros están llenos de errores, los segundos, teñidos de ganas de no equivocarme otra vez. El espacio es tan acogedor como me permite mi honestidad. Ni muy pequeño como para sentirse incómodo, ni demasiado grande como para meter mentiras. Mis recuerdos, los dejé todos esparcidos por ahí, en cajas de zapatos gastados y cansados de merodear por vida ajenas. No pises aún, que está fregado con lágrimas recientes, y podrías resbalar. Yo te aviso. 

El interruptor general de corriente está conectado a cada una de tus sonrisas. Intenta administrarlas bien y no reírte demasiado a carcajadas, no vayas a fundirlo de sopetón. 


No sé si te lo había comentado antes, pero la estufa la pones tú.
Y hablando del tema, he intentado que la temperatura del agua siempre estuviera a tu gusto, pero si de vez en cuando notas un jarro de agua fría, eso es que se me ha ido la mano con el calentador. Sal y vuelve a entrar pasados unos minutos. Discúlpame si es la única solución, es lo que tenemos los de la vieja escuela, que a estas alturas ya no nos fabrican ni los recambios.

Tampoco acaba de funcionarme bien la lavadora. Hay cosas del pasado que necesitarán más de un lavado, es inevitable. Y ha cosas del futuro que, como es normal, se acabarán gastando de tanto lavarlas. La recomendación, ensuciarse a su ritmo y en su grado justo. Eso sí, no te preocupes por lo que pase con las sábanas, que las mías lo aguantan todo. 

Para acabar, te he dejado un baño de princesa, una cama de bella durmiente, un sofá de puta de lujo y algo de pollo hecho en la nevera. Para que los disfrutes a tu gusto, eso sí, siempre que sigas reservando el derecho de admisión. Aquí no vienes a rendir cuentas, sino a rendirte tú. Aquí no vienes a competir con nadie, sino a compartirte a mí. Y lo de dar explicaciones, déjalo para el señor Stevenson. 

El resto, no sé, supongo que está todo por hacer. Encontrarás que sobra algún tabique emocional, que falta alguna neurona por amueblar y que echas de menos, sobre todo al principio, alguna reforma en la fachada y estructura.

Dime que tienes toda la vida, y voy pidiendo presupuestos.
Dime que intentaremos toda una vida e iré encofrando mis nunca más.
Risto Mejide, ese hombre que levanta odios y pasiones.  Aquí no vienes a rendir cuentas, sino a rendirte tú..... Entre los años que te busqué y los que te pienso seguir encontrando.... Me parece magnífico. 


miércoles, 24 de marzo de 2010

No puedo adentrarme más en la espesura de tu pelo:
llevan años publicando en los periódicos que estoy perdido.
Sigo perdido hasta próximo aviso.
El lenguaje es ya insuficiente para pronunciarte
y las palabras son como caballos de madera
que corren tras de ti noche y día, sin alcanzarte.
Siempre que me acusan de quererte,
me siento superior; convoco una rueda de prensa
y reparto tus fotos a los periodistas,
aparezco en la pantalla del televisor
con la rosa del escándalo prendida en mi ropa.
Escuchaba a los enamorados
hablar de sus amores, y me reía.
Pero cuando volví al hotel
y tomé el café, solo,
supe cómo penetra el puñal del amor en el costado
para no salir nunca.
Mi problema con la crítica
es que siempre que escribo un poema en negro,
dicen que lo he copiado de tus ojos.
Mi problema con las mujeres
es que siempre que niego mi relación contigo,
oyen el tintineo de tus pulseras en la vibración de mi voz
y ven tu camisón colgado en el armario de mi recuerdo.
No me acostumbres a ti: el médico me ha aconsejado
que no mantenga mis labios en los tuyos
más de cinco minutos, ni me siente bajo el sol de tus pechos
más de un minuto, para no abrasarme.
Si conoces a un hombre que te quiera más que yo,
preséntamelo para felicitarlo
y luego matarlo.


Nizar Qabbani

jueves, 18 de marzo de 2010

hay una trampa en cada cosa que dices.

Las trampas me recuerdan a las cuestas que bajábamos cuando empezaba la primavera, desde la sierra, cuando escuchábamos rostro de actriz porque yo te pedía que pusieras el disco. Y le daba directamente para que sonase. La trampa eran tus manos conduciendo. La trampa era el sol que empezaba a no acostarse temprano. La trampa era nuestra ficción convertida en una historia triste que no nos dejaba ver más allá….. como las mariposas. La trampa enredaba mis recuerdos cada vez que abrías la puerta y desempañabas el cristal. La trampa era volver a un puerto lleno de anclas oxidadas. De trozos de barco, de olor a podrido. Ese puerto recóndito que, sin embargo, tiene la magia del lugar al que regresar cuando no sabes quién eres. Y allí te encontré siempre, recordándome que todo estaba muerto, diciéndome que lo habíamos abandonado. A veces cuando parece sencillo, lo sientes tan cerca que el miedo no te deja entrar… No te deja entrar. 



Hay una trampa en cada cosa que dices 

y mariposas que no nos dejan ver más allá. 
Hay una puerta en tu rostro de actriz, 
se desliza el profeta para poder entrar. 

Cuando suenan las campanas y entran los rayos del sol, 
cada vez que abres la puerta y desempañas el cristal 
querremos volver a puerto una vez en alta mar. 

En la calle hablan los ingenuos 
y sé que otros callan por no decir la verdad. 
A veces cuando parece sencillo 
te sientes tan cerca que el miedo no te deja entrar. 

Cuando suenan las campanas y entran los rayos del sol, 
cada vez que abres la puerta y desempañas el cristal 
querremos volver a puerto una vez en alta mar. 
Cada vez que abres la puerta y desempañas el cristal ... 

Hay una trampa en tu rostro de actriz, 
se desliza el profeta para poder entrar. 

Cuando suenan las campanas y entran los rayos del sol, 
cada vez que abres la puerta y desempañas el cristal 
querremos volver a puerto una vez en alta mar. 
Cada vez que abres la puerta y desempañas el cristal ...


lunes, 15 de febrero de 2010

El lugar donde viene a morir el amor.

El lugar donde viene a morir el amor -Zahara-. Me parece tan perfecta la letra.... que creo que ni siquiera le hace falta música. Pero la canción se encuentra fácilmente... 

Traté de describir el tedio y la constancia

Hablé de algunas cosas verdaderas, creí que duraderas
Y conté hacia atrás para dormirte
Y fracasé....

Tú de dedicaste el espacio, la cordura, 
la lluvia caliente y húmeda, la historia de tu espera
que viene a por mi las tardes de marzo
que deja pasar en su nombre el dolor

Asistiremos tan elegantes
y entre las flores
diremos adiós


Mira el pecho abierto
tu corazón inmóvil está apunto de partirse en millones de colores
y vas a morir en este momento

serás afortunado si no deja de doler

Asistiremos tan elegantes
y entre las flores
diremos adiós




viernes, 12 de febrero de 2010

Hay algo en ella que surge,
Hay algo en ella que mata.
Que me lleva amenazando desde siempre
por las cuerdas de la sangre que la atan.
Agotadas las esperas,
la encontré descafeinada de raíces,
reservado en la distancia de su alma.

Hay algo en ella triste,
hay algo en ella cálida.
Casi muerta y de repente tan hiriente
Casi viva y sin embargo tan lejana.

No consiento desterrarme las costumbres,
las que fueron de sus curvas siempre esclavas.
No recuerdo ningún tiempo más vivido
que el que fue en el déja vu de su mirada.
Que surge, que mata, triste, cálida.....